Mantener sábanas y toallas impecables es clave en los alquileres turísticos. La limpieza de estos textiles afecta la satisfacción de los huéspedes y sus reseñas. Estos trucos mantienen sábanas y toallas impecables, prolongando su frescura. Elimine manchas persistentes y brinde a sus huéspedes una experiencia de lujo. Con cuidados simples pero efectivos, sus textiles lucirán como nuevos por más tiempo, dejando una impresión duradera en cada cliente.
Las manchas de maquillaje, especialmente las de base y labial, son habituales en sábanas y toallas. Un método efectivo es aplicar una mezcla de bicarbonato de sodio y agua sobre la mancha., déjala actuar unos minutos y luego enjuaga con agua fría. Para manchas más persistentes, el pretratamiento con detergente neutro también es útil.
Estas manchas requieren un tratamiento rápido para evitar que se adhieran. Primero, sumerge la prenda en agua fría y luego aplica un quitamanchas o una mezcla de vinagre con agua con gas. Evita el agua caliente, ya que puede fijar las manchas. Después, lava la prenda normalmente para asegurarte de que el residuo haya desaparecido.
Manchas de sudor, sangre y alimentos también son comunes. Para las manchas de sudor, una mezcla de agua y vinagre es útil; para las de sangre, usa agua fría y, si es necesario, un poco de peróxido de hidrógeno. Las manchas de alimentos suelen desaparecer con detergente líquido aplicado directamente antes del lavado. Recuerda evitar el secado de textiles si aún tienen manchas, ya que el calor puede hacerlas permanentes.
Elige un ciclo de lavado y temperatura adecuados para proteger las fibras de las sábanas y toallas, especialmente si son de algodón blanco. Lavar a temperaturas moderadas (entre 40 y 60 °C) es ideal para limpiar profundamente sin dañar el material.
Utilizar detergentes neutros y blanqueadores sin cloro ayuda a mantener las telas en buen estado. El vinagre y el bicarbonato de sodio son opciones naturales, eliminan residuos, reducen el desgaste de las fibras y preservan la frescura de las telas.
Secar al aire es ideal para evitar que las toallas se endurezcan. Si usas secadora, elige una temperatura baja y retira las toallas un poco húmedas para conservar su suavidad. También puedes usar bolas de secado para mantener la esponjosidad sin dañar las fibras.
El percarbonato de sodio es ideal para mantener el blanco sin dañar las fibras. Para conservar la frescura, guarda las sábanas y toallas en lugares secos y ventilados, y coloca bolsitas de algodón con lavanda o bicarbonato, lo cual ayuda a mantener un aroma fresco y agradable.
Invertir en una buena limpieza de sábanas y toallas es clave para la satisfacción del cliente y para prolongar la vida útil de los textiles. Un mantenimiento adecuado no solo ahorra dinero a largo plazo, sino que también mejora la experiencia del huésped, traduciéndose en mejores reseñas y más recomendaciones.
Automatiza el registro de huéspedes en tu alojamiento turístico y cumple con el envío documental a SES Hospedajes.
Utilizamos cookies para mejorar tu experiencia de navegación, analizar nuestro tráfico y mostrar anuncios. Al hacer clic en "Aceptar todo", consientes nuestro uso de cookies. Consulta nuestra política de privacidad.